El futuro de la agricultura estará determinado por la interacción entre dos factores: por un lado, la presión del aumento y el cambio de la demanda del consumidor y la degradación ambiental, y, por otro, las oportunidades que ofrece la tecnología.
La principal consideración para el primer factor es el crecimiento de la población: en 2050, la población mundial habrá crecido en aproximadamente un tercio, llegando a 9.700 millones de personas, según el informe de las Naciones Unidas World Population Prospects.
El sector agrícola no solo tendrá que producir más alimentos de los que actualmente necesita para hacer frente a este crecimiento de la población, sino que deberá hacerlo de manera que mantenga una productividad sostenible frente al aumento de las temperaturas y otros desafíos ambientales.
Con la regulación y los consumidores exigiendo un sector agrícola más respetuoso con el medioambiente que reduzca el consumo de agua, el desperdicio de alimentos y disminuya la distancia desde la “granja a la mesa”, existe una creciente presión sobre los agricultores para que cambien su forma de operar.
Este sector está explorando la tecnología de aprendizaje automático.
Es vital que el sector agrícola mundial pueda adaptarse a estos desafíos, no solo por su propio bien, sino también por la estabilidad geopolítica del mundo. Los avances tecnológicos ofrecen una forma de mejorar drásticamente la eficiencia. En sus esfuerzos por aprovechar la revolución digital, estas compañías están explorando la tecnología de aprendizaje automático y claramente avanzando a fin de encontrar una manera de enfrentar los desafíos del futuro.
La agricultura de precisión se convertirá en la norma, aumentando la eficiencia en todos los niveles del proceso agrícola y, por lo tanto, permitiendo que el sector obtenga más productos de su tierra de una manera sostenible y respetuosa con el medio ambiente.
Una vez que las granjas cuenten con este tipo de red, tendrán los volúmenes de datos de calidad que requieren para manejar la IA y las tecnologías de aprendizaje automático.
- El mejor poder de procesamiento de las computadoras coincidió con el del cerebro de una araña en 2000, pero para 2023 habrá desarrollado computadoras que puedan procesar datos a nivel del cerebro humano.
- Para el año 2045, podríamos haber desarrollado computadoras con una potencia de procesamiento 100.000 veces superior a la de los humanos, según el futurólogo principal Ray Kurzweil.
Aplicar este tipo de poder analítico a la agricultura y sus difíciles condiciones podría generar enormes aumentos en la productividad, ahorros de costos y nuevas formas de agricultura sostenible. Si bien la agricultura está sometida a nuevas y pesadas presiones provenientes de una amplia gama de fuentes, también está forjando un futuro más productivo y sustentable con la última tecnología: un futuro emocionante espera a quienes abrazan esta visión.
las granjas del futuro pueden utilizar sensores inteligentes en una red IoT que abarca toda la operación agrícola. Este tipo de red actuará como base para una operación agrícola que se adapta en tiempo real a los cambios ambientales, por ejemplo, maximizando la producción de ciertos cultivos en condiciones climáticas favorables, protegiendo automáticamente los rendimientos crecientes de la lluvia o el granizo, o diagnosticando un brote de enfermedad entre plantas o animales antes de que se arraigue. La robótica automatizada será capaz de abordar estos problemas sin la intervención de un ser humano.